Qué frustración por no decir otra cosa... Desde el pasado 21 de enero en Bastión de Alanos es misión imposible encontrar el momento para ir a tirar. Todo parecía bien planeado, no iba a estar en Londres, el invierno se veía amable... Pues aquí estoy un mes después y he ido vez y media. Una vez a finales de enero a hacer el recorrido nuevo en Arqueros de Madrid y me quedé encantado, buenas sensaciones y buena compañía. Otra vez hace dos semanas mendigando un par de horas a un fin de semana de lluvia y que aunque perdonó tuve un día penoso, desconcentrado, viéndolo todo plano...

Como agua de mayo esperaba ir este fin de semana a tirar, tiempo correcto, tirada en Bastión de Alanos, bien, prometía. Pues gripazo y a quedarme en casa con un enfado... El resto del tiempo ha sido básicamente imposible encajar por compromisos o por tiempo o por mala suerte o ¡daba igual! siempre sucedía algo.

Dan frío y lluvia para todo lo que queda de semana, maravilloso.

En fin, seguro que no estoy siendo razonable, al fin y al cabo es invierno y hay meses que se junta todo, pero tirar con arco es una adicción y empiezo a notar los efectos del síndrome de abstinencia y quizá no estoy para racionalizar mucho.

Además, el problema de periodos de tiempo así es que corres el riesgo de que cuando finalmente vas a tirar es cuando hay una tirada social o un torneo y está genial, disfruto mucho, pero no es la forma de mantener la técnica. Saltar de torneo en torneo es una fórmula desastrosa para la mayoría de nosotros porque aunque vaya uno poco a poco relativizando la presión, no puedes tomarte tu tiempo, parar cuando quieras, volver a tirar una diana desde otro sitio...

¡Sólo espero que esto cambie pronto!


Así empecé el año ¡que no pare ahora! :)