Y digo III y no "final" porque una cosa es que se acaben las clases y haya sucedido el examen y otra que el curso se haya terminado, aún quedan las prácticas tuteladas y la entrega de un trabajo antes de recibir el título de Monitor RFETA.
Este último fin de semana estuvo bastante bien, quizá el mejor de los tres. Tenía menos de novedad pero es probable que a nivel pedagógico fuera el mejor, en todo caso dentro de lo que han sido tres grandes fines de semana.
Los 30 alumnos volvimos con ganas de "rematar" el curso. Sabíamos que el domingo tendríamos el examen, el último compromiso de hora y lugar de este proceso ya que las prácticas puedes hacerlas donde quieras (o puedas) y el trabajo se prepara desde la comodidad de tu casa. Eso no impidió que estuviéramos en cada momento a lo que teníamos que estar.
El viernes Carlos Morillo nos explicó muy bien qué es la fiebre del amarillo, por qué se produce, cómo se previene (hasta cierto punto) y cómo se amortigua o corrige cuando padecemos los síntomas. Estuvo muy bien porque lo diseccionó con mucho criterio, atacó algunos falsos mitos o "trucos" para "curártelo" y nos dio herramientas útiles para actuar rápida y eficazmente contra una de las principales causas de abandono en el tiro con arco (junto con el uso de arcos con excesivo libraje).
El viernes, si no recuerdo mal, continuó con ejercicios técnicos para la iniciación. Fue describiendo uno a uno una gran colección de ejercicios específicos para trabajar aspectos de la técnica sin necesariamente trabajar la técnica de base en sí. La técnica de base requiere equilibrio, por ejemplo, y existen ejercicios para trabajar este aspecto como puede ser tirar a la pata coja o de puntillas. ¿Tirarías así? Seguramente no, pero te sirve para interiorizar a nivel de posicionamiento muscular la técnica correcta.
El sábado fue un día muy completo para mí, quizá menos para tiradores de arco compuesto. Durante la mañana Carlos nos habló de arco compuesto en profundidad, en qué se diferencia y en qué no se diferencia en cuanto a técnica del arco recurvo. Hizo especial énfasis en un buen arco compuesto de iniciación y sus características así como los diferentes tipos de disparadores que existen y cuáles son muy nocivos para la fiebre del amarillo y están desaconsejados.
Un Mathews Genesys Pro, recomendado para iniciarse en arco compuesto
A decir verdad, no tocó apenas el aspecto físico-mecánico de un arco de poleas (por qué se reduce la potencia, la causa del let-off) pero a cambio habló de todos los parámetros que han de tenerse en cuenta para entender este tipo de arcos y cuándo y cómo introducirlos en un curso o escuela de iniciación. Aquí tuvimos un apartado de práctica con algunos alumnos "modelo" que ayudó muchísimo a clarificar los conceptos, sobre todo de seguridad, algo que siempre está arriba en la lista de prioridades cuando enseñamos a tirar con arco.
Carlos haciendo de "monitor" de la alumna más joven del curso
Antes de la hora de comer, consiguió colar algo de arco desnudo, anclaje apache, string walking y face walking. Me sorprendió que mucha gente desconociera esta modalidad pero quizá es porque en Arqueros de Madrid se da más que en otros clubes y lo veo más normal. Con el arco desnudo como excusa, metió un poquito de arco instintivo y longbow pero solo a efectos de insistir que es la misma técnica de base con otras formas de obtener referencias al apuntar (sin entrar en la polémica de si todos apuntamos o no, que no era el curso para eso). Como arquero de longbow e histórico, eché en falta un poco más de contenido de instintivo y longbow pero, a decir verdad, en este curso la mayoría estábamos familiarizados con ellos. Quizá en otro curso futuro preguntaría a los alumnos por sus modalidades y adaptaría un poco esta parte del curso para compensar mejor los conocimientos.
La tarde fue una maravilla de prácticas. Volvimos con Javier Zarco y las parejas de arquero-monitor así que estuve las 4h de la tarde de nuevo con Amanda turnándonos en ese rol mientras tirábamos de nuestro lado "malo" (en nuestro caso, ambos de zurdo). Javier había puesto 15 puestos con un ejercicio en cada uno haciendo muy tangible la explicación del día anterior de Carlos. Según íbamos rotando cada 5 minutos, teníamos que tirar de cuclillas, o de puntillas, o mover la cabeza hacia atrás o delante tras anclar antes de soltar (y mantener la apertura exactamente igual), o tirar cerrando los ojos, o tirar tras haber movido el tronco hacia arriba o abajo previamente...
Dio tiempo a que los probáramos todos pero también, tras 90 flechas, a que nos dolieran los dedos de la cuerda (tiramos con arcos de poca potencia pero al usar la mano contraria, ésta está muy "blandita" y sufre especialmente si el anclaje es largo, como era el caso).
Me gustaron todos pero especialmente el de girar el cuello y la cabeza hacia atrás y volver a su posición sin que afecte al anclaje (de escápula, el bueno). También fue divertido el de la plataforma en equlibrio (ver vídeo).
El ambiente era fantástico y creo que todos aprendimos muchísimo esa tarde. Javier nos llamó un poco la atención para evitar que cuando nos tocara de monitor estuviéramos en modo espectador, él podía ser uno y nosotros 30 pero nos tenía bien controlados.
Buen ambiente por la tarde
Terminó el día con una demostración del encoque coreano, que realizó Pablo, uno de los alumnos, antes la mirada aprobadora de Javier y luego una introducción al form-master (ver vídeo), una codera para mano de cuerda que vía goma o cordel se engancha a la cuerda del arco y se libera a partir de una tensión determinada, útil para trabajar el último recorrido de la tensión antes de soltar y evitar soltar de forma estática. Al igual que el segundo fin de semana, en lugar de acabar a las 20h nos fuimos a las 20.30h. Javi nos dio muchos ánimos para el examen del domingo y nos dijo que habíamos sido el mejor curso de monitores que había tenido (tampoco es que tenga todos los años pero lleva décadas en esto... y yo no tenía motivo para no creerme lo que nos dijo!)
Un momento de la tarde tras un "a ver, venid un momento que os explico una cosa" de Javier Zarco
Hoy domingo aún quedaba tiempo para una clase sobre planificación tanto de una escuela como de un curso. Carlos nos ha introducido al concepto de temporada con sus diferents estructuras o ciclos, muy útiles para entender que algo que se trabaja en octubre servirá para un resultado que espera en marzo, por ejemplo. En un curso de iniciación la planificación sigue teniendo todo el sentido pero se vuelve muchísimo menos flexible, algo sobre lo que ya comentaron bastante el primer fin de semana.
Antes del descanso previo al examen, hicimos un ejercicio colectivo de planificar una actividad de promoción incluyendo material, personal, actividades y presupuesto pasando luego a un curso de iniciación de 36 horas en 3 meses. Ha sido tremendamente valioso porque andábamos algo desencaminados con la de promoción, pero se me ha quedado cortísimo. Menos mal que la documentación adjunta del curso entra en mucho más detalle porque esructurar bien un curso, una escuela o una promoción será responsabilidad nuestra.
Y así de pronto llegó el examen. Hubo un breve descanso para tomar un café y estirar las piernas y de vuelta al aula para el examen. Creo que muchos creíamos que al ser tipo test sería un examen rápido pero ha sido todo lo contrario. No las he contado pero calculo que han sido más de 140 preguntas y a mí me habrá llevado como una hora y cuarenta minutos de las dos horas máximo que teníamos. La dificultad estaba contenida. En mi opinión era un examen difícil de suspender si has estado atento en el curso y te has repasado la documentación básica pero complicado de bordarlo porque había preguntas en donde había más de una respuesta que sonaba suficientemente bien, algunas que requerían pequeños desarrollos escritos o, sobre todo, preguntas que trataban temas que solo estaban en la documentación y que no se habían tratado específicamente en la clase. En mi caso, creo que he dejado sin responder tres o cuatro (alguna de seguridad sobre los metros de alto de parapetos laterales de seguridad y algunas de poleas) y me habré arriesgado con otras tres o cuatro (3 fallos cancelan 1 acierto). De un total de más de 140 preguntas no me preocupa mucho, la verdad.
Si no has asistido al curso y te dan este examen, es probable que lo suspendas, pero si has asistido al curso, sería muy raro que lo suspendieras porque supondría que estás aplicando tu visión personal de lo que es ser monitor de iniciación ignorando mucho de lo que se ha comentado estos tres fines de semana. En este sentido actúa como control para que no se cuele algún "maestrillo con su librillo" o algún "cabezón".
Hemos ido terminando a cuentagotas y nos hemos ido despidiendo. Muchos pensamos que la mayoría nos volveremos a ver y yo así lo espero porque da la sensación de que hemos salido una buena "promoción" y hemos estado todos muy a gusto de compañeros.
Mi valoración coincide con la de Bene, que lo ha expresado antes del examen a Carlos, y es que el curso ha superado con creces mis expectativas. Venía con prejuicios claros de "rollo", "trámite", "burocracia", "sólo teoría" incluso con el aviso de Alberto Díaz de Arqueros de Madrid de que "la gente que lleva este curso son muy buenos", y he salido sabiendo muchísimo más de tiro con arco y con ganas de ponerlo en práctica pronto. Mi agradecimiento a todos, Carlos, Javi, Rafa e Irene, por haber hecho este curso tan ameno y didáctico y haber cambiado mis objetivos originales para sacarle provecho tras él.
¿Qué queda ahora? Pues algo relativamente cómodo de hacer, un trabajo para presentar un curso de iniciación y también algo más lioso, porque no dependes de ti en exclusiva, que son 30h de prácticas tuteladas por un monitor RFETA o Nivel 1. Hay unos plazos máximos para entregar el trabajo y el informe firmado por el monitor así que esto no ha terminado, ni mucho menos. Yo creo que tengo cierta suerte porque en Arqueros de Madrid ya contaban con facilitar esas prácticas a los que somos del club pero habrá que ir planificándolo con tiempo. Os iré contando también esa parte antes de dar por concluida esta serie de artículos.
La foto de grupo que sacamos el primer fin de semana, un bonito recuerdo
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