2017, un año arquero en retrospectiva

Ha sido un año que ha tenido de todo. Mirando los artículos que he escrito, nada menos que 50 sin contar con los de gente invitada como Andrés, Luiyo, Ana, Teresa, Noelia y Sonsoles, tengo material que perfectamente hubiera podido cubrir dos o tres años. En todos los planos, ha sido un año sobresaliente y no creo que vaya a ser fácil contar con otro año así en poco tiempo. En parte esto es cierto porque el proceso de aprendizaje atraviesa a veces por etapas que son particularmente intensas e irrepetibles. Se podría asemejar un poco al paso por la universidad, por ejemplo.

Para que este artículo no resulte caótico, he pensado que podría dividir el año en cinco categorías; equipo, afición, técnica, viajes y competiciones. También incluyo a Angela en buena parte de la reflexión porque aunque vivimos el tiro con arco de forma diferente, ambos lo consideramos una parte importantísima de nuestro ocio.

Equipo

El equipo con el que empezamos el año Angela y yo ha variado relativamente poco salvo por el nuevo arco de Angela que llegó hace un mes, su custom Slick Stick de Bodnik Bows (Bearpaw Products) y mi nuevo arco vikingo. Para mí fue el año de la dactilera en lugar del guante y creo que seguiré un tiempo más con la dactilera pero reconozco que me siento cómodo tanto con una como con el otro. Me compré una brazalera con el emblema del club de Ithilien y poco más. Mis arcos han sido el Falco Force, el arco vikingo y el longbow inglés de carruaje. Empleé el Falco Force la primera mitad del año como la opción más obvia de cara al mundial IFAA en Italia. A finales de verano me interesé por el vikingo y finalmente el resto de año he tirado con el longbow inglés de carruaje salvo por las últimas 3 semanas del año en las que volví a coger mi Falco.


Mi longbow inglés en una tirada otoñal

Angela ha tenido también cierta variedad. Empezó el año con su Slick Stick de cara al mundial IFAA en Italia, a la vuelta se volcó con su Mollegabet (arco de diseño mesolítico) para probar bien las nuevas flechas encargadas a Carol Archery, luego rescató el Slick Stick de nuevo y cuando por fin llegó su custom Slick Stick (5 libras más) tiró varias veces con él para confirmar que se lo quedaba.

Un vídeo corto con su Mollegabet y flechas de Carol. Un ejemplo de buena técnica


Angela y su nuevo "Golden Halla". Habrá reseña completa por febrero

A día de hoy podríamos decir que tenemos cada uno dos arcos con dos sets de flechas canónicos. Por mi parte tengo el Falco Force Vintage de 66" a 35# con flechas Falco Premium de 40-45# de spine y el longbow inglés de carruaje de Sylvan Archery de 75" y 40# y flechas Falco Premium de 30-35# de spine. Angela actualiza su equipo para tener su custom Slick Stick de 59" y 30# con flechas de carbono Bearpaw Penthalon Slim de 1300 de spine o flechas de madera Falco Premium de 25-30# (que seguramente querrá subir de spine) junto con su Mollegabet de 66" y 25# a 25.5" de apertura con flechas de madera de Carol Archery a medida.

Afición

2017 fue para nosotros claramente el de la creación de nuestro club deportivo de tiro con arco afiliado a IFAA. Efectivamente, con la desaparición de ANAB y el nacimiento de AAL y su norma de estar afiliados a un club en AAL para obtener a tarjeta deportiva, hubimos de crear Ithilien al ver que Arqueros de Madrid se desmarcaba de AAL en esta nueva etapa.


Escudo de Ithiliien. Diseño de Juan de la Cruz, arquero del club

Recurrimos a amigos y amigas que tiran con arco y obtuvimos el apoyo de un total de 15 integrantes. Lo que empezó siendo un mero vehículo burocrático fue cobrando forma a través de diversas tiradas "oficiales". Ithilien sigue siendo un club virtual sin campo, ni cuotas ni un "programa" concreto más allá de agrupar a amistades en el tiro con arco, pero reconozco que ha sido un invento maravilloso y por el que seguiremos apostando en 2018.


Un foto de parte del club durante la tirada de Navidad de Arqueros de Madrid

Por mi parte, también quiero destacar mi participación en el curso de Monitor RFETA de tiro con arco, que supuso una ampliación de conocimientos importante a la hora de transmitir una buena técnica a otras personas. Aún no ha terminado el proceso ya que falta el informe de las prácticas y la nota del trabajo pero debería tener mi título para el mes de marzo de 2018.

2017 fue también el año en el que dimos a conocer la Society for the Promotion of Traditional Archery SPTA a algunos amigos durante un viaje a Inglaterra y Gales. La SPTA es para nosotros una ventana a otro tipo de afición por el tiro con arco, más centrada en la historia y en la difusión de diversas formas de entenderla por otras tantas culturas. Es también un lugar donde encontrar gente de otras partes del mundo en un ambiente lúdico-festivo muy refrescante.

Como anécdota también querría añadir que celebré mi cumpleaños organizando una tirada con paella con mis buenos amigos de Bastión de Alanos que se volcaron con nosotros. Allí fuimos unos cuantos amigos y amigas para hacer el recorrido e inventarnos posteriormente algunos juegos de puntería hasta que nos dieron las siete de la tarde. Fue una forma muy divertida de unir la propia afición al tiro con arco, amistades y una celebración como es el cumpleaños.


Una paella fantástica en un día que resultó todo un éxito

Sobre esto tengo que decir que algo que ha caracterizado sobremanera a 2017 es la mayor actividad arquera de nuestro entorno de amistades. Lo que empezó siendo un tibio acercamiento en 2015 o 2016, ha evolucionado rápidamente a cierta regularidad y a muchas jornadas de encuentro en el campo. Para mí probablemente es de lo mejor de 2017.

Técnica

En cuanto a la técnica, ha habido pocos cambios en 2017. Angela ha mentenido su elegante forma de tirar con arco, en donde sigue a rajatabla su ritual desde el doblar el codo para pronarlo adecuadamente hasta una suelta suave hacia atrás sin aspavientos.

En mi caso, tuve que emplearme a fondo para adaptar la técnica de base que se resuelve sin problemas con el Falco a los dos arcos históricos con los que tiré la segunda mitad del año. Me costó el agarre de un arco vikingo muy delgado pero también el del longbow inglés. Al final creo que opté por no cantear el arco en ningún momento y mantener así una técnica más parecida.

Uno de los grandes retos ha sido el tiempo de anclaje. Con los arcos históricos no se recomienda mantener el arco abierto durante mucho tiempo (más de 3-4 segundos) ya que pierdes propiedades mecánicas. Esto invita peligrosamente al snapshooting o anclaje brevísimo, algo de lo que trato de huir constamentemente. Creo que lo he conseguido ya hacia finales de año, sobre todo en la última tirada de la liga de Arqueros de Madrid.

Dos buenísimas flechas con el longbow

Coqueteé brevemente tras el verano con volver a tener una referencia en el anclaje de la comisura del labio en lugar del hueso de la mandíbula atrás pero no me convenció, me quedo de momento con el encaje de mi mano tras el hueso de la mandíbula.

Viajes

En viajes claramente destaca el que tuvimos que hacer para asistir al mundial IFAA de 3D en Italia en junio (WBHC 2017). Fue una semana alucinante en donde experimentamos la alta competición pero al "estilo IFAA". La experiencia resultó ser muy completa. Por un lado, lo que es un mundial y la organización asociada. Por otro, la interacción con arqueros y arqueras de todo el mundo ya fuera en la patrulla de ese día o en otras actividades. Finalmente, la presión de hacer una buena actuación.


Angela y yo en la Piazza della Signoria en Florencia durante el desfile inaugural

También fueron geniales los dos viajes a Inglaterra y Gales para asistir al St George's Shoot y al Cream Tea Shoot de la SPTA. Son viajes que ya tenemos relativamente "controlados" en la parte logística y en movernos por la zona y eso hace que podamos centrarnos simplemente en disfrutar de las tiradas. Este año además, al término de la tirada de St. George, participamos de una visita organizada al museo del Mary Rose, un pecio de finales de la guerra de los cien años rescatado con toda su gloria arquera para deleite de los visitantes de la ciudad de Portsmouth.


Tiro vertical en donde Angela se lució (St. George's shoot)


Una escena que parece salida de un cuadro en el Cream Tea Shoot

Y, por supuesto, nuestro viaje a Alemania por vacaciones que tuvo dos hechos notables. El primero, la entrevista de Angela con Henry Bodnik en la sede de Bearpaw para hablar de su arco a medida; un recorrido en coche por el centro de Alemania que mereció mucho la pena. El segundo, el placer inconmensurable de tirar con arco en la Selva Negra, ya fuera en el campo del hotel para arqueros donde nos alojamos o en otros campos 3D de la zona. Todavía impacta recordar la cantidad y calidad de propuestas 3D y el entorno natural en donde poder disfrutarlas. Lejos de querer mantener en secreto esa información, fuimos rápidos en divulgarla a los lectores de este blog.


Angela ante un grupo de ciervos

Competiciones o torneos

Quisiera terminar con el capítulo de las competiciones, en mi opinión parte de la salsa del tiro con arco si no se abusa de ellas. De hecho, creo que este año 2017 ha tenido la dosis correcta de competiciones aunque quizá mal repartida porque el mundial fue de mucha intensidad y luego hubo parones demasiado largos.

Aquí Angela tiene menos que relatar porque sin huir de ellas, es cierto que las competiciones no le atraen mucho por dos motivos; suponen habitualmente "madrugar" innecesariamente en fin de semana y añaden una cierta presión que no llega a disfrutar del todo.

Aun así, participó con un gran papel en el mundial IFAA de Italia a pesar de ir armada con su Slick Stick de 25 libras en distancias IFAA aplicadas al máximo, quedó ganadora en la estupenda Tirada Medieval de Torrijos con una fase clasificatoria brillante y una final de película, ganó asimismo en su categoría en la tirada de la SPTA de la Cream Tea Shoot (y prácticamente a casi todo el mundo ese día) y de nuevo subió al primer puesto del podio en Longbow en la tirada de Navidad de Arqueros de Madrid. En resumen, salvo lógicamente el mundial WBHC, Angela ha ganado prácticamente todo en lo que ha aceptado participar.

La emocionante final de Torrijos

Por mi parte, disfruté muchísimo de mi primera liga centro IFAA. Me sirvió para conocer otros campos y mucha buena gente afiliada a AAL/IFAA. También me sirvió como entrenamiento para el mundial WBHC de junio. Esta liga centro de IFAA me reconcilió con las ligas de clubes tras mi decepción con la de la FMTA el segundo año de nuestra aventura con el tiro con arco. Quedé subcampeón en categoría longbow. En el mundial, al que iba con objetivos modestos, me encontré relativamente a gusto y a día de hoy sigo recordando algunos de los mejores tiros que he hecho nunca. Auténticas joyas para revisitar siempre que me apetezca. Quedé en el ecuador de la tabla clasificatoria al final del torneo y terminé con un excelente sabor de boca.


José Luis Hervás, presidente de AAL, me entrega el trofeo en la liga IFAA centro

Lamentablemente, entre viajes, el curso de monitor, etc, la liga de Arqueros de Madrid se quedó un poco en suspenso. Una verdadera lástima. Es quizá junto con mi ausencia del campeonato de España de IFAA 3D lo que peor he llevado de 2017. A cambio, sí que pude participar en el I Open IFAA de la Comunidad de Madrid en categoría histórico en donde quedé primero.

En resumen, 2017 ha sido un año particularmente intenso y prolífico en tiro con arco, muy disfrutado y con cierta sensación de progresión y asentamiento. Estamos hablando de nuestro cuarto año como arqueros y hemos abarcado casi todo lo que se puede hacer. No sabría qué pedir para 2018 pero desde luego me conformaría con el aspecto de las amistades arqueras y una consolidación de lo aprendido en 2017.

Solo me queda desearos un próspero 2018 lleno de buenas flechas, yo seguiré aquí relatando mis experiencias con el arco.